viernes, 6 de noviembre de 2020

Castores Cómo manejar una plaga que afecta la biodiversidad

  

Castores Cómo manejar una plaga que afecta la biodiversidad

Un estudio realizado por investigadores del INTA y del Conicet, junto con universidades y organismos nacionales e internacionales, evaluó diferentes técnicas de trampeo para su erradicación. 

Se trata de una plaga que impacta en la actividad productiva de la región.

En la actualidad, se estima que hay más de 100.000 castores dispersos en la Patagonia. 

Traídos desde Canadá con el objetivo de desarrollar una industria peletera, es una especie que se introdujo en 1946 en la Isla Grande de Tierra del Fuego. 

Durante 30 años estuvo vedada la caza de castor en la isla para proteger a la población recién formada y, posteriormente, hubo muy poco interés en desarrollar esta actividad.

“Los castores, que en esta nueva tierra no contaban con ningún enemigo natural (ni depredadores ni competidores), incrementaron notablemente su población y se expandieron más allá del ambiente donde fueron liberados”, explicó Pablo Jusim, del Centro Austral de Investigaciones Científicas –CONICET–. 

Y agregó: “Se expandieron no sólo en el área boscosa de la isla, tanto en el lado argentino como en el chileno, sino que también ocuparon la estepa, donde se asientan los campos ganaderos”.

De acuerdo con el investigador, algunos castores lograron cruzar cuerpos de agua salada y establecerse en la mayor parte del archipiélago fueguino e incluso el extremo sur del continente, en Chile. 

Asimismo, “se ha estimado que las poblaciones de castores podrían incluso expandirse hasta el norte de la provincia de Neuquén”.

Los castores son roedores estrictamente herbívoros que se alimentan principalmente de la corteza de los árboles. 

Habitan en madrigueras que construyen en estanques que ellos mismos generan al hacer diques en los ríos. 

Tanto para comer como para conseguir material para sus construcciones talan gran cantidad de árboles, los que se suman a los árboles y otras plantas que mueren ahogados al inundar el área.

Se calcula que solamente en el bosque fueguino hay inundados 40 kilómetros cuadrados (equivalente a el área que comprende el partido de Tres de Febrero, en Buenos Aires). 

“Estos son los impactos más visibles en la modificación del paisaje, producto de la actividad del castor, pero también se suman la contaminación de los ríos que abastecen las ciudades, la inundación de campos de pastoreo y el beneficio que traen a otras especies exóticas invasoras como los visones”, indicó Andrea Goijman, investigadora del Instituto de Recursos Biológicos del INTA.

Por esta razón, en el año 2007 se realizó un estudio con especialistas internacionales en el que se determinó que era posible erradicar al castor de la Patagonia y, en 2008, se firmó un acuerdo con Chile para la restauración ambiental a través de la erradicación de esta especie en ambos países. 

En ese estudio se recomendó llevar a cabo pruebas piloto con un objetivo doble: por un lado, capacitar tanto a tramperos como a gestores, y por otro, resolver cuestiones técnicas antes de la erradicación definitiva.

Un estudio recientemente publicado en la revista Biological Invasions aborda el análisis de una prueba piloto de erradicación de castores y determina qué variables están asociadas al éxito de captura de castores en una pequeña zona del bosque fueguino.

Del trabajo participaron además del INTA y CONICET, investigadores de la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales de la Universidad de Buenos Aires, el Instituto de Ciencias Polares, Ambiente y Recursos Naturales de Universidad Nacional de Tierra del Fuego, la Dirección General de Áreas Protegidas y Biodiversidad de Ushuaia, Tierra del Fuego, y la Wildlife Conservation Society.

La prueba piloto se llevó a cabo en la reserva provincial Corazón de la Isla, en el centro de la provincia de Tierra del Fuego, durante abril y mayo de 2014. 

Allí trabajaron tres parejas de tramperos, utilizando trampas de golpe y lazos.

“Los tramperos no solamente capturaban animales, sino que registraban cada trampa que colocaban, revisaban o retiraban y el resultado obtenido. 

Con estos datos se pudo hacer un análisis para determinar el esfuerzo que implicó la erradicación de los castores en un río de esa reserva”, explicó Jusim. 

Además, indicó que “se modeló el éxito de la captura con diferentes variables para ver cuáles son las que más afectan la posibilidad de capturar castores y se analizaron los diversos inconvenientes que surgieron durante las etapas de trampeo y análisis de datos”

Estos análisis permitieron pensar formas de evitar los inconvenientes y generar recomendaciones para futuros ensayos de erradicación del castor a mayor escala.

Los resultados del trampeo arrojaron que un total de 115 individuos fueron capturados mediante 590 noches-trampa con trampas de golpe y 265 noches-trampa con lazos, con una eficiencia general del 13,5 %. 

“Si bien este valor de eficiencia parece bajo y es de hecho más bajo que el obtenido en otros trabajos, hay que considerar que es más difícil capturar al último individuo en una colonia, lo que lleva a tener varias trampas colocadas el tiempo que sea necesario hasta lograr capturar a ese último individuo”, agregó Adrián Schiavini, director principal del proyecto.

Siguiendo a los investigadores, “esta experiencia permitió evaluar desde técnicas de trampeo hasta métodos estadísticos para analizar los datos”. 

Entre otras cosas, se averiguó que el uso de trampas de golpe fue más eficiente que los lazos, por lo que en general son más recomendables. 

Sin embargo, al ser los lazos mucho más livianos se los puede transportar en mayor cantidad hacia áreas aisladas.

bty

“Su uso es necesario en zonas en donde existe riesgo de capturar un animal nativo como el huillín, ya que con los lazos se lo podría liberar. 

Por otro lado, dentro de un dique las trampas se pueden colocar en varios sitios, obteniéndose distintos resultados”, puntualizó Goijman, y detalló que la colocación en toboganes (salidas del castor desde el estanque a tierra o a otro estanque río arriba) o en la salida de la madriguera aumenta la eficiencia de captura.

Entre otras recomendaciones, el estudio destaca: la necesidad de mejorar el sistema de recolección de datos a través de la tecnología digital (tabletas) y de utilizar GPS para indicar la ubicación de las operaciones; la importancia del tipo de trampa utilizada de acuerdo con los sitios específicos de la colonia; y probar estrategias alternativas de captura para reducir un posible aprendizaje de los animales. 

Por otra parte, recomendaron poner como meta para los cazadores un objetivo de erradicación en lugar del número de capturas y, asegurar la sostenibilidad política del programa más amplio.

INTA

inngeniar


martes, 13 de marzo de 2018

Ushuaia - Desde la próxima temporada aumentará el número de cruceros que arribarán



A partir de la temporada 2018/2019 el número de cruceros antárticos que llegarán al puerto de Ushuaia, en Tierra del Fuego, aumentará de 25 a 33, gracias a reducciones de costos, incentivos para el sector e inversión en infraestructura, según informó el Ministerio de Transporte de la Nación.

De acuerdo a las proyecciones de la industria, la cifra de buques antárticos de exploración y turismo continuará creciendo en las próximas tres temporadas, alcanzando un incremento de hasta un 40 por ciento.

Los datos fueron presentados al ministro de Transporte, Guillermo Dietrich, por las principales empresas operadoras del sector en Sea Trade, el encuentro internacional más importante de cruceros a nivel mundial, en la ciudad estadounidense de Fort Lauderdale.

Durante el encuentro con los operadores antárticos, las autoridades de la compañía Ponant anunciaron que en la próxima temporada sumarán un nuevo crucero a los tres que hoy ya operan y que la proyección es continuar creciendo hasta llegar a un total de once en los próximos años.

También la compañía Quark sumará un nuevo buque el año próximo.

En el evento también se analizó la posibilidad de potenciar la conectividad aérea, para que los pasajeros que realizan su travesía en crucero puedan continuar conociendo otros destinos del país en combinación desde el aeropuerto de Ushuaia.

Además, el gobierno Nacional ampliará en Ushuaia el muelle incorporando 7.050 metros cuadrados de superficie nueva, extendiendo el actual sector tres en 215 metros de longitud, con una inversión de 319 millones de pesos que aumentará la capacidad y versatilidad del puerto.

Esta temporada, la terminal de Ushuaia recibió 119.790 pasajeros, un 21 por ciento más respecto de la anterior, y un 32 por ciento más en comparación con 2014/2015.

casarosada

sábado, 17 de febrero de 2018

El efecto de la pisada humana en la playa



Científicos del CONICET realizaron un estudio por primera vez en Argentina para evaluar como las pisadas humanas pueden afectar a ciertos invertebrados marinos.

Los mejillines son organismos bentónicos que cubren el suelo de la mayoría de las costas rocosas de Argentina, formando un densa capa de miles de organismos.

Debajo de estos pequeños bivalvos viven otros animales, que se benefician obteniendo refugio y alimento.

Además los mejillines son la base de la cadena trófica marina.

A pesar de su importancia en el ecosistema, son animales muy frágiles.

Tan frágiles que solo unas pocas pisadas pueden desprenderlos del sustrato e incluso matarlos.

Los investigadores asistentes del Instituto de Biología de Organismos Marinos (IBIOMAR-CONICET), María Martha Mendez y Juan Pablo Livore y el investigador independiente Gregorio Bigatti, realizaron el primer estudio en Argentina sobre el efecto que el trampling o pisoteo humano tiene sobre estos organismos en costas rocosas cercanas a la ciudad de Puerto Madryn en Chubut.



Punta Este es una playa que se encuentra alejada unos diez kilómetros del centro de Puerto Madryn y que los habitantes de la ciudad utilizan durante el verano.

La zona intermareal de la playa que es el sector que queda al descubierto en el lapso de tiempo en que el mar se retira, es habitada por mejillines.

Por ahí pueden llegar a caminar durante el verano 250 personas al día.

Las actividades que los visitantes realizan en este sector pueden tener consecuencias a largo plazo sobre estas comunidades de invertebrados.

“En marzo de 2015, cuando ese sector de la costa ya no era visitado, delimitamos en un sector de la playa cuadrículas de 25 por 25 centímetros para evaluar si la cobertura de los organismos que habían sido pisados por la gente durante el verano volvían a alcanzar sus valores naturales, que son cercanos al 100 por ciento del sustrato rocoso.



En los 9 meses posteriores a la temporada, periodo de inactividad de esa playa no hubo una recuperación completa en la cobertura de estos mejillines para volver a tapizar el sustrato que había quedado descubierto.

Ahora estamos estimando el tiempo total que necesitan para recuperarse”, afirman los investigadores.

Según explican los científicos, estudios realizados en otras localidades, sugieren que organismos similares a los mejillines pueden tardar varios años en restablecerse luego de un disturbio como el pisoteo pero en la Argentina es la primera vez que se hace este tipo de trabajo y debe tenerse en cuenta las características de la costa y las condiciones de oleaje, viento y desecación de Patagonia, que no se repiten en otros sitios del mundo.

“Esta investigación demuestra que el tiempo entre dos temporadas de verano no es suficiente para que estos animales puedan recuperar su abundancia natural.

Si bien aún no sabemos exactamente cuánto tiempo necesitan para la recuperación, estamos trabajando para establecerlo”, asegura Mendez.

Sin embargo, pese a haber comenzado este estudio hace solo tres años, los científicos ya han obtenido conclusiones de este y otros estudios complementarios que resultan contundentes: sí más de 50 personas pisan la zona de mejillines durante los primeros fines de semana del verano, se pierde más del 50 por ciento de la cobertura de estos organismos.

“En los sectores a los que los visitantes no pueden acceder, la cobertura de estos animales alcanza un 95 por ciento de cobertura y se reduce drásticamente en las zonas que sí acceden”, indica Livore.



Según comentan los científicos, otro factor a considerar es la frecuencia o la repetición de pisadas sobre un mismo sitio.

“En Punta Este, es habitual utilizar la plataforma rocosa como trampolín para ingresar al agua.

Los visitantes repiten ese movimiento varias veces y eso afecta aún más la posibilidad de recupero que estas comunidades bentónicas tienen”, afirma Mendez.

El próximo paso para los investigadores es establecer con exactitud el número de personas que al caminar sobre los mejillines logra desprenderlos del sustrato, datos vinculados a las frecuencias de pisadas y el tiempo que tardan estos animales en restablecerse como población.

Esta información podría resultar de utilidad para que las autoridades de manejo puedan implementar políticas tendientes a la protección de los invertebrados en las costas rocosas de Patagonia.

Por Alejandro Cannizzaro

CONICET

miércoles, 27 de septiembre de 2017

El Gobierno nacional busca crear dos nuevos parques nacionales marinos



El Gobierno Nacional presentó un proyecto de ley para la creación de dos nuevas áreas marinas protegidas, que incrementarán la superficie marina costera, llevándola a 155.918 kilómetros cuadrados y constituye el primer paso para lograr la protección del 10 por ciento de esas zonas.

Las áreas protegidas que conformarán los parques serán Yaganes y Namuncurá - Banco de Burdwood, ubicadas en la Zona Económica Exclusiva del Mar Argentino.

Yaganes aporta el 0,23 por ciento del esfuerzo pesquero a nivel nacional y sumará a la protección marina costera más de 69 mil kilómetros cuadrados, mientras que Burdwood representa el 0,81 por ciento de la actividad pesquera, con una superficie de más de 28 mil.



Este compromiso de creación es el resultado de un proceso de búsqueda de consensos para una política de Estado de conservación y uso racional de los ecosistemas marinos, que incluyó un amplio diálogo intersectorial y participativo, con la realización de talleres interministeriales y una Consulta Nacional de Océanos con una mesa de trabajo integrada por el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sustentable, la Administración de Parques Nacionales y los ministerios de Agroindustria, de Energía y Minería, y de Relaciones Exteriores y Culto.

La iniciativa, además, está enmarcada en la Ley del Sistema Nacional de Áreas Marinas Protegidas, cuya autoridad de aplicación es la Administración de Parques Nacionales, bajo la órbita del Ministerio de Ambiente.

La Argentina suscribió a nivel internacional la meta de conservar al menos el 10 por ciento de sus zonas costeras y marinas para el año 2020, objetivo que se encuentra previsto en el Plan Estratégico para la Diversidad Biológica 2011-2020, así como en los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la Agenda 2030, adoptada por la Asamblea General de las Naciones Unidas (ONU).

casarosada

lunes, 4 de septiembre de 2017

Se reglamentó la Ley de Desarrollo Sustentable del Sector Acuícola



En el día de hoy salió publicada en el Boletín Oficial la reglamentación de la Ley de Acuicultura (decreto 692/2017) que fue aprobada por el Congreso de la Nación a fines de 2015.

La reglamentación era la última instancia del proceso comenzado con la sanción de la Ley que dotará a la actividad acuícola de un marco normativo para su regulación, control, fiscalización y fomento.

Si bien el volumen de producción de acuicultura en el país continúa siendo pequeño (3.712 toneladas en 2016), existe un enorme potencial de crecimiento dada la existencia de recursos naturales y aguas de calidad, la amplia disponibilidad de insumos para producción de alimento balanceado, la existencia de instituciones de enseñanza, investigación y desarrollo, y la imagen positiva que tiene Argentina como país productor de alimentos.

En ese sentido, organismos internacionales como la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) sostienen que Argentina es uno de los principales países con potencial para el desarrollo de la actividad.

Las principales especies producidas actualmente son el pacú (52% del total producido), la trucha (38%), la carpa (3%) y el surubí (2%), con una participación mayoritaria de proyectos ubicados en las provincias de Misiones, Buenos Aires, Neuquén y Chaco.



En ese sentido, este sector puede jugar un rol fundamental en la generación de empleos y en la promoción del desarrollo económico de dichas provincias.

Con el objetivo de fomentar la actividad en distintas regiones del país, la Ley prevé la creación de un Fondo Nacional de Acuicultura (FONAC) que dispondrá de una partida del presupuesto nacional por diez años.

Dicho Fondo podrá otorgar asistencia financiera a los proyectos de pequeña escala y a las Pyme que produzcan un máximo de 1.000 toneladas.

Además, la ley prevé beneficios impositivos por diez años para los productores, que incluyen deducciones a impuestos provinciales de bienes personales e ingresos brutos, amortización anticipada del valor de las maquinarias adquiridas y eliminación de aranceles de importación de aquellas maquinarias que no se producen a nivel nacional.

Por último, podrá sancionar prácticas nocivas para los recursos naturales y los organismos acuáticos, promoverá la investigación científica, el agregado de valor y desarrollo socioeconómico, cultural y profesional de los actores del sector.

Según el subsecretario de Pesca y Acuicultura de la Nación, Tomás Gerpe, "el decreto reglamentario de la ley de acuicultura es un gran beneficio para aquellos que tienen en vista la actividad ya que les brinda un marco normativo y establece el acompañamiento del Estado en cuestiones impositivas, asistencia en infraestructura, entre otros.

Se da, así, el primer paso para el desarrollo de una actividad incipiente en nuestro país pero con un gran potencial, generando impacto positivo en las economías regionales: creación de nuevas pymes y nuevas fuentes de trabajo."

Acceso a la normativa acá

Agroindustria


Antena Tecnologica - Acuicultura - Agosto 2017



ingresar

Programa Vintec
MINCyT


domingo, 7 de mayo de 2017